Espacio de información sobre Formación de terapeutas Reiki, formación de instructores de meditación, zen y terapias de crecimiento personal y espiritual
Energía vital que se transfiere
La energía vital de un ser humano no necesariamente muere con la muerte física, dando pie a fenómenos como la reencarnación. “Para explicar esto de forma gráfica, diría que el cuerpo es como un televisor: mis antenas captan y reproducen un programa televisivo. Esos receptores recogen esa transmisión. Si estoy viendo la tele y se estropea el tubo de la imagen, ha muerto el televisor, pero sigue la transmisión. Pero si otro ser tiene los mismos receptores que tienes tú, volverás a estar trasmitiendo lo mismo, pero en otro cuerpo. Esto explica la reencarnación y quiere decir que el cuerpo puede ir y venir, pero la transmisión siempre está ahí. Nunca había creído en el espíritu, pero la pregunta que me planteé es: ¿por qué esa duplicidad? ¿Por qué tenemos un espíritu y un cuerpo?
Y la respuesta vino de mis células: si sólo existiera el espíritu, ¿Cómo sé a qué sabe el chocolate? Y sí sólo tengo una parte física y no una parte espiritual, ¿Cómo puedo experimentar y emocionarme con una puesta de sol? ¿Y cómo voy a sentir cuando estoy enamorado? La lección más importante de todo esto es que estar vivo es un regalo, y que hay que experimentar alegría por todo lo que podemos sentir.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario